Los trastornos alimenticios son enfermedades crónicas y progresivas que, a pesar de que se manifiestan a través de la conducta alimentaria, en realidad consisten en una gama muy compleja de factores entre los que prevalece una alteración o distorsión de la auto-imagen corporal, un gran temor a subir de peso y la adquisición de una serie de valores através de una imagen corporal.
Precisamente son aquellos que repercuten de forma negativa en la alimentación de la persona, condicionando su vida y llevándola, incluso, a la muerte.
Padecer un transtorno alimenticio es como sufrir adicción por una cosa: la comida. Cuando no sabes qué es lo necesario para tu cuerpo, si has comido de más o de menos, si sólo sabes pensar en la comida durante todo el día y te torturas con ello, con dietas, ejercicio; tu imagen corporal no es la que los demás dicen que tienes, tienes el humor diferente, te sientes mal y no sabes por qué, y todo, absolutamente todo lo achacas a la comida... seguramente tengas algún transtorno de alimentación.
El problema, por supuesto, no es la comida. Ése es el síntoma. Hay que descubrir la verdadera raíz del asunto para poder superar estas enfermedades. Y pueden ser fáciles de curar o muy dolorosas.
Los factores que causan trastornos alimenticios:
• Factores biológicos. Hay estudios que indican que niveles anormales de químicos en el cerebro predisponen a algunas personas a sufrir de ansiedad, perfeccionismo, y comportamientos y pensamientos compulsivos. Estas personas son más vulnerables a sufrir un trastorno alimenticio.
• Factores psicológicos. Las personas con trastornos alimenticios tienden tener expectativas no realistas de ellos mismos y de las demás personas. A pesar de ser exitosos se sienten incapaces, ineptos, defectivos, etc. No tienen sentido de identidad. Por eso tratan de tomar control de su vida y muchas veces se enfocan en la apariencia física para obtener ese control.
• Factores familiares. Personas con familias sobreprotectoras, inflexibles e ineficaces para resolver problemas tienden a desarrollar estos trastornos. Muchas veces no demuestran sus sentimientos y tienen grandes expectativas de éxito. Los niños aprenden a no demostrar sus sentimientos, ansiedades, dudas, etc,y toman el control por medio del peso y la comida.
• Factores sociales.Los medios de comunicación asocian lo bueno con la belleza física y lo malo con la imperfección física. Las personas populares, exitosas, inteligentes, admiradas, son personas con el cuerpo perfecto, lo bello. Las personas que no son delgadas y preciosas son asociadas con el fracaso.